Los negativos de siempre usan el argumento de la amenaza de privatización en todo lo signifique ordenar el desorden en México. Y ese cuento lamentablemente lo calienta y azuza los medios informativos, a quienes todo lo signifique escándalo lo gozan, se regodean con ello.
Ahora le tocó en turno a la industria eléctrica, la cual simple y sencillamente no puede ser privatizada por mandato de la Constitución. El gobierno federal, en el marco de sus atribuciones constitucionales, decretó la liquidación de una empresa PARAESTATAL que desde hace muchos años era una verdadera carga para el Estado, y por ende para el pueblo. Esta situación obviamente se tornó crítica por la crisis global en la que estamos inmersos.
El gobierno federal aseveró que la extinción de Luz y Fuerza del Centro no implica la privatización del servicio eléctrico, que se mantendrá como público y se brindará "con toda normalidad".
En conferencia de prensa el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, precisó que los empleados serán indemnizados conforme a la Ley del Trabajo y el Contrato Colectivo, al tiempo que descartó que esa acción sea una medida contra los gremios.
"No es una medida contra el sindicalismo. No aceptamos que se diga que se trata de una medida que se tomó contra los sindicatos, sino que es una decisión que se basa en una situación económica", porque en esa empresa se había generado un boquete que se hacía impagable en el futuro, expuso.
Al respecto, el funcionario informó que sin afán de deslealtades o actitudes que tiendan a poner una trampa, dialogará este domingo con los dirigentes sindicales y los trabajadores de los otros grupos del gremio para conducir personalmente el proceso de liquidación conforme a derecho.
En cuanto al liderazgo del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), comentó que no tiene información sobre alguna orden de aprehensión contra Martín Esparza, con quien se comunicó durante la madrugada y le ofreció que el diálogo en la secretaría a su cargo será totalmente libre.
También reiteró el pleno respeto del gobierno federal al derecho de manifestación y dijo que no se esperan actos de sabotaje por personal de la compañía, aunque aclaró que la Segob está obligada a hacer respetar la ley cuando se presenten actos ilegales.
El funcionario también confirmó que el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes tomará las decisiones sobre la forma de operar del nuevo organismo, por ser el encargado de operar la liquidación.
Gómez Mont Urueta estuvo acompañado por los secretarios de Hacienda, Agustín Carstens; del Trabajo, Javier Lozano Alarcón; y de Energía, Georgina Kessel Martínez; así como por el director de la Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub.
Este último garantizó la plena operatividad de la extinta compañía de luz, porque los equipos son muy similares a los que se usan en Guadalajara y la Comisión Federal de Electricidad cuenta con ingenieros altamente capacitados.
Elías Ayub aseguró que ya se están atendiendo las primeras llamadas del público para problemas de servicio, que se seguirá prestando con toda normalidad.
Los funcionarios coincidieron en que el gobierno federal respetará los derechos de los trabajadores y que les ofrecerán liquidaciones superiores a las de ley.
Al respecto el secretario de Hacienda informó que todo el paquete para las liquidaciones de los trabajadores tendrá un costo de 16 mil millones de pesos, considerando los términos de la Ley Federal del Trabajo y el Contrato Colectivo.
Sin embargo si los trabajadores se acogen a una oferta especial "para hacer más tersa la transición", se les ofrecerá una compensación adicional que incrementaría el costo hasta 20 mil millones de pesos.
Para ello, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público preparó recursos provenientes de partidas para la reestructuración de empresas públicas y podría complementar el dinero con las economías que se puedan alcanzar en lo que resta de este año.
Así están las cosas, y todo lo que arguyan Andrés Manuel López Obrador y sus achichincles –léase: Gerardo Fernández Noroña, Alejandro Encinas, Jesús Ortega, Pablo Gómez, Carlos Navarrete, Graco Ramirez, etc.-- es la acostumbrada perorata para alborotar y engañar a sus adormilados seguidores y a los que les encanta que les tomen el pelo. De Porfirio Muñoz Ledo mejor no apunto nada porque ya se convirtió en payaso de cualquier escena obradorista.
Ahora le tocó en turno a la industria eléctrica, la cual simple y sencillamente no puede ser privatizada por mandato de la Constitución. El gobierno federal, en el marco de sus atribuciones constitucionales, decretó la liquidación de una empresa PARAESTATAL que desde hace muchos años era una verdadera carga para el Estado, y por ende para el pueblo. Esta situación obviamente se tornó crítica por la crisis global en la que estamos inmersos.
El gobierno federal aseveró que la extinción de Luz y Fuerza del Centro no implica la privatización del servicio eléctrico, que se mantendrá como público y se brindará "con toda normalidad".
En conferencia de prensa el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, precisó que los empleados serán indemnizados conforme a la Ley del Trabajo y el Contrato Colectivo, al tiempo que descartó que esa acción sea una medida contra los gremios.
"No es una medida contra el sindicalismo. No aceptamos que se diga que se trata de una medida que se tomó contra los sindicatos, sino que es una decisión que se basa en una situación económica", porque en esa empresa se había generado un boquete que se hacía impagable en el futuro, expuso.
Al respecto, el funcionario informó que sin afán de deslealtades o actitudes que tiendan a poner una trampa, dialogará este domingo con los dirigentes sindicales y los trabajadores de los otros grupos del gremio para conducir personalmente el proceso de liquidación conforme a derecho.
En cuanto al liderazgo del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), comentó que no tiene información sobre alguna orden de aprehensión contra Martín Esparza, con quien se comunicó durante la madrugada y le ofreció que el diálogo en la secretaría a su cargo será totalmente libre.
También reiteró el pleno respeto del gobierno federal al derecho de manifestación y dijo que no se esperan actos de sabotaje por personal de la compañía, aunque aclaró que la Segob está obligada a hacer respetar la ley cuando se presenten actos ilegales.
El funcionario también confirmó que el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes tomará las decisiones sobre la forma de operar del nuevo organismo, por ser el encargado de operar la liquidación.
Gómez Mont Urueta estuvo acompañado por los secretarios de Hacienda, Agustín Carstens; del Trabajo, Javier Lozano Alarcón; y de Energía, Georgina Kessel Martínez; así como por el director de la Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub.
Este último garantizó la plena operatividad de la extinta compañía de luz, porque los equipos son muy similares a los que se usan en Guadalajara y la Comisión Federal de Electricidad cuenta con ingenieros altamente capacitados.
Elías Ayub aseguró que ya se están atendiendo las primeras llamadas del público para problemas de servicio, que se seguirá prestando con toda normalidad.
Los funcionarios coincidieron en que el gobierno federal respetará los derechos de los trabajadores y que les ofrecerán liquidaciones superiores a las de ley.
Al respecto el secretario de Hacienda informó que todo el paquete para las liquidaciones de los trabajadores tendrá un costo de 16 mil millones de pesos, considerando los términos de la Ley Federal del Trabajo y el Contrato Colectivo.
Sin embargo si los trabajadores se acogen a una oferta especial "para hacer más tersa la transición", se les ofrecerá una compensación adicional que incrementaría el costo hasta 20 mil millones de pesos.
Para ello, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público preparó recursos provenientes de partidas para la reestructuración de empresas públicas y podría complementar el dinero con las economías que se puedan alcanzar en lo que resta de este año.
Así están las cosas, y todo lo que arguyan Andrés Manuel López Obrador y sus achichincles –léase: Gerardo Fernández Noroña, Alejandro Encinas, Jesús Ortega, Pablo Gómez, Carlos Navarrete, Graco Ramirez, etc.-- es la acostumbrada perorata para alborotar y engañar a sus adormilados seguidores y a los que les encanta que les tomen el pelo. De Porfirio Muñoz Ledo mejor no apunto nada porque ya se convirtió en payaso de cualquier escena obradorista.
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